Argumento
Agnes Marti es una arqueóloga en paro
que se ha mudado a Londres en busca de una oportunidad laboral. Una
tarde, desanimada y triste por su poco éxito profesional, tropieza
en el corazón del barrio del Temple con el pomo de una puerta en
forma de pluma, el sonido de unas lúgubres campanillas y el hermoso
rótulo azul de Moonlight Books.
La librería, regentada con encantador
ceño fruncido por Edward Livingstone, debe su nombre a un
espectacular techo de cristal que permite contemplar la luna y las
estrellas en las noches despejadas. Intrigada por la personalidad y
el sentido del humor del señor Livingstone, Agnes decide aceptar la
oferta de convertirse en ayudante del librero mientras continúa su
búsqueda de trabajo.
El té de la tarde en el rincón de los
románticos, las visitas de Mr. Magoo, las conversaciones con la
bella editora de Edward, las cenas junto a la chimenea del Darkness
and Shadow y la buena lectura convencerán a Agnes de que la
felicidad está en los pequeños detalles cotidianos.
Pero aunque Moonlight Books podría
parecer un oasis de paz en el acelerado Londres, las extrañas
campanillas de su puerta daran paso a los sucesos más inesperados:
una noche de tormenta, el inspector John Lockwood...
Opinión
Ya conocía la forma de escribir de
esta autora y sabía que iba a disfrutar con la novela.
Consigue transmitir tranquilidad y
optimismo, generosidad y mucha empatía con los demás. Me ha sacado
más de una sonrisa con el humor británico que destila y la ironía
del señor Livingstone, que es mi personaje favorito.
La historia tiene un ritmo ágil y no
me he aburrido, me han encantado todas las referencias a obras
clásicas y la descripción de la librería.
En resumen, una novela cálida y llena
de magia.