Sinopsis
Ser cartera te da oportunidad de
aprender muchas cosas. Es lo que siempre dice Amor, quien, pese a los
recortes y las duras jornadas recorriendo la ciudad con una pesada
saca de cartas, sabe sacarle partido a su profesión. Conoces gente,
ves los movimientos en el barrio, notas los cambios en jardines y
mascotas, adviertes enseguida los envíos sospechosos...
Amor, bella y suspicaz, empieza a
desconfiar al tener que entregar cada día un sobre certificado
urgente en el mismo domicilio. Lo peor es que no está preparada para
que le abra la puerta un enorme y arrebatador hombre, que parece
recién salido de un anuncio de colonia. Maduro, atractivo, con
increíbles ojos azules, recibe cada día su correo (y a Amor) con
una sonrisa que quita la respiración.
Amor se siente cautivada, aunque no
entiende por qué se muestra tan cortés con ella, una simple
empleada de Correos vestida con botas, un gastado abrigo y el casco
de la moto. ¿No será que quiere ganársela porque tiene algo que
ocultar? Desde luego, su acento extranjero es difícil de
identificar. ¿Será un mafioso? ¿Un psicópata? Cuando el
misterioso forastero la invita a cenar, nuestra bella y joven heroína
sabe que, tal vez, esté metiéndose ella sola en la boca del lobo...
Opinión
A pesar de todos los pesares que voy a
decir a continuación, el libro me ha entretenido.
La protagonista es insufrible, de las
que confunde ser tiernas y adorables con estar cayéndose todo el
rato para que el guapetón de turno las salve y metiendo la pata con
cualquier cosa. Además es poner un pie fuera de España y
desarrollar un sentido patrio exasperante, solo le falta cantar a voz
en grito “Que viva España”. Pereza, pereza.
Los demás personajes no están bien
perfilados ni profundiza en ellos y hay muchas cosas que quedan en el
aire o quizá sea un trilogía y la información está dosificada
para despertar nuestro interés.
La trama es totalmente inverosímil. La
autora misma reconoce que su novela es “poco creíble” (Nota de
la autora) y la verdad es que es una historia imposible de creer.
Lo que salva el libro de ser abandonado
es la habilidad de la autora para tejer un culebrón que, en
conjunto, resulta simpático y te hace pasar un rato agradable. No,
no es un libro mínimamente verosímil pero entretiene.
Me apetece leer más cosas de Arlette
Geneve porque si con semejantes elementos ha logrado conquistarme,
seguro que disfrutaré mucho con alguno de sus mejores libros.
No hay comentarios:
Publicar un comentario